El Sindicato Nacional Interempresa de profesionales y técnicos del cine y el audiovisual (SINTECI), hizo un llamado urgente a su más de 700 socios y socias, y a todas y todos los trabajadores del rubro, a adherirse al paro nacional de mañana 12 de noviembre, en apoyo a las demandas sociales que la ciudadanía exige y en repudio a los abusos perpetuados por años de políticas neoliberales, representadas en la sordera de un gobierno opresor e incapaz de conducir
Sus dirigentes hicieron un llamado urgente a todos sus socios y socias, trabajadores, empleadores, productoras y a todos los que se relacionan con el sector audiovisual, a solidarizar con la demanda y luchas ciudadanas.
Así también, comunicaron que se sumarán, junto a otras organizaciones, a las actividades que comenzarán desde las 11:00 hrs, en Plaza de la Dignidad (ex Plaza Italia).
“Solidarizamos y somos parte de todas las luchas que está dando la ciudadanía, con el objetivo de iniciar un cambio estructural que haga de Chile un país más justo, humano, amable y con derechos fundamentales para todos sus habitantes. Como trabajadores profesionales y técnicos del cine y audiovisual, conocemos la precariedad laboral que viven millones de compatriotas a diario y del abuso legalizado que busca atomizar a los trabajadores. Creemos que esta instancia es trascendental para avanzar unidos, potenciando las colectividades y el tejido social, en el desarrollo de una participación ciudadana efectiva y vinculante, que traiga el bienestar a nuestros más de 700 representados”, indicó Daniela Espinoza, presidenta SINTECI.
“Sabemos que será un día historico y por lo mismo llamamos a la unidad de nuestro sector frente a esta medida necesaria en post de un chile más justo, para el pueblo y sus trabajadores”, continuó.
También la directiva hizo hincapié a que las reiteradas violaciones a los derechos humanos, las más de 200 víctimas de del estado con perdida ocular, los más de 622 niños, niñas y adolescentes detenidos, los 20 fallecidos en manos del estado las últimas 3 semanas nos duelen, pero también nos movilizan y nos obligan a enfrentar el día de mañana junto a los trabajadores de Chile.